Xalapa, Veracruz, México, a viernes 29 de marzo de 2024

Salen 12 mil niños de Myanmar cada semana por violencia: Unicef

Salen 12 mil niños de Myanmar cada semana por violencia: Unicef

Notimex, 19 de octubre de 2017

Naciones Unidas.- La violencia en Myanmar contra la comunidad rohingya sigue provocando la salida masiva de miembros de esa etnia, entre los que se cuentan unos 12 mil niños que llegan cada semana a Bangladesh, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

En un informe emitido la noche de este jueves, Unicef destacó que los recién llegados se suman a unos 320 mil niños rohingyas, quienes viven bajo miserables condiciones de vida en campos de refugiados en Bangladesh, donde cunde la desnutrición y enfermedades como el cólera.

“Muchos niños rohingya refugiados en Bangladesh han sido testigos de atrocidades en Myanmar que ningún niño debería ver, y todos han sufrido una tremenda pérdida”, expresó Anthony Lake, director ejecutivo del Unicef.

Lake añadió que estos niños necesitan urgentemente alimentos, agua potable, saneamiento y vacunas para protegerlos de enfermedades que proliferan en situaciones de emergencia.

El funcionario de la ONU manifestó que estos menores de edad también necesitan ayuda psicológica, educación y esperanza.

“Si no les proporcionamos estas cosas ahora, ¿cómo llegarán a ser ciudadanos productivos de sus sociedades? Esta crisis está robando su infancia. No debemos permitir que robe también su futuro”, aseveró.

En total, más de medio millón de personas de la etnia musulmana rohingya han cruzado desde fines de agosto el distrito conocido como Cox’s Bazaar, en el sur de Bangladesh, luego de escapar de horribles actos de violencia en la vecina Myanmar.

Estas personas se han sumado a unos 200 mil rohingyas que ingresaron en anteriores contingentes de refugiados. Casi el 60 por ciento de los recientes grupos están constituidos por niños, cruzando a una tasa de entre mil 200 y mil 800 por día.

Unicef destacó que estos niños refugiados viven en asentamientos improvisados, plagados de insalubridad, a pesar del esfuerzo de ayuda internacional en expansión, liderado por el gobierno de Bangladesh.

“Los refugiados aún están llegando, y ya podemos ver los terribles peligros que enfrentan los niños”, afirmó Edouard Beigbeder, representante de Unicef en Bangladesh.

Beigbeder aseguró que los refugiados viven a la intemperie, con escasez de alimentos y agua potable, así como malas condiciones sanitarias, con riesgo de contraer enfermedades infecciosas y otros males.

Se han encontrado altos niveles de malnutrición aguda severa entre los niños pequeños en los campamentos, y faltan servicios prenatales para madres y bebés, además de que es necesario ampliar el apoyo a los infantes traumatizados por la violencia, destacó Unicef.

El informe también alertó que debido a la configuración caótica de los campamentos, los niños y los jóvenes podrían ser víctimas de los traficantes y otros grupos delectivos que buscan explotarlos y manipularlos.

Unicef hizo además un llamado para que terminen las atrocidades contra civiles en el estado de Rakhine, en Myanmar, y para que la asistencia humanitaria pueda entrar sin restricciones a ese país.

Actualmente, Unicef no tiene acceso a los niños de la etnia rohingya en el estado de Rakhine.